Doble sérum, o lo que es lo mismo, la combinación idónea de dos fórmulas distintas en un mismo envase, consiguiendo 2 sérums en 1. Una fase acuosa y una fase lipídica que se fusionan perfectamente en el momento de la aplicación, para crear un símil de la barrera cutánea.
Pero vamos a tratar de explicarlo de una forma sencilla: al aplicar el doble sérum, la unión de ambas fases sobre la piel del rostro produce un potente efecto instantáneo y facilita la absorción del producto. Ambas texturas fusionan, todo se vuelve ligero, agradable, sedoso y la penetración es perfecta. Nada más ponértelo, la piel adquiere otro aspecto… es una inyección revitalizante.
Los sérums se caracterizan por la presencia de activos a muy alta concentración y aquí los tenemos por partida doble. Lejos de la creencia de que el sérum sólo es idóneo para pieles maduras, podemos y debemos usarlo a cualquier edad. Precisamente por ello, existen diferentes tipos de sérums adaptados a las necesidades de cada tipo de piel: hidratante, nutritivo, antioxidante, detoxificante, anti-envejecimiento, energizarte o reparador, etc.
El secreto es la combinación de dos potentes cosméticos, en un único envase con un dosificador de última tecnología, que se complementan al aplicar el producto.
El aplicador permite la sinergia de los activos de cada fórmula, uniéndolos en un solo producto que, en ese mismo instante, se convierte en una solución de máxima concentración. El resultado es un efecto único de “segunda piel” que favorece la absorción. Al ser más ligero que una crema, poseer doble textura y por la alta concentración de sus ingredientes activos, suaviza, protege y refuerza la barrera protectora de nuestra piel.
La formulación más avanzada, el envase bicompartimental único y el aplicador desarrollado especialmente, son la triple razón del éxito del sérum de doble textura que, por si fuera poco, además de mejorar las características de tu piel, potencia los resultados de cualquier tratamiento adicional. Una auténtica revolución en el mundo de la cosmética. Y aunque es perfecto como un único producto de tu ritual de belleza, tanto por la mañana como por la noche, si lo combinas con tu tratamiento posterior habitual, éste, lejos de alterarse, mejorará sus resultados.
Podríamos seguir escribiendo más sobre lo efectivo y científicamente avanzado que es el doble sérum, pero por mucho más que te contemos, hay cosas que no se entienden hasta que no las experimenta uno mismo, y ésta es claramente una de ellas. Para entender todo lo que acabamos de contar, simplemente hay que probarlo. Siente sus efectos en tu propia piel, notarás el efecto reparador al instante. Tendrás una sorprendente sensación de cuidado, ciencia y belleza en tu piel, todo en un mismo producto y en un mismo envase.